- Tal que entonces se compara la concepción con la naturaleza (ese escenario compartido en la sensaciones primarias, que no son dependientes de un lenguaje comunicativo), para poder catalogar el relato de ficticio o especulativo o científico.
La categoría especulativa, aunque no dice abiertamente que sean ficciones, si dice que no es categoría científica, porque las especulaciones no están en la experiencia natural.
Así un duende es un concepto que se compara con la naturaleza, se comprueba que no están, y se categorizan como ficción, que igual se pueden categorizar como especulación, porque se puede decir que hasta ahora no han aparecido en la naturaleza los duendes.
Este debate es un debate sobre qué es científico y qué es especulativo.
# El debate racional (coherencia, consistencia, congruencia, sentido, relato, relación) no debate sobre qué es especulativo (ficción) y qué es científico, no trata este debate, no le importa si un concepto es ficción o es natural, mientras haya concepto, ni le importa si está correctamente categorizado en ser ficción o en ser natural. La procedencia del debate racional es que haya concepto tal que el debate es ¿hay o no hay concepto?, es decir, ¿Hay coherencia (sentido, concepción, idea, experiencia, literaria, literal), o hay incoherencia (sinsentido, sin concepto, sin idea, sin experiencia, sin literaria, sin literal)?
- Tal que las incoherencias no son ficciones.
Las ficciones se pueden negar, porque se conciben el concepto que al negarse se compara con la naturaleza. Ejemplo: "este concepto (duendes, dioses, extraterrestres, midiclorianos, vacas voladoras, humanos voladores) no es natural, por lo tanto es ficticio o especulativo".
Las incoherencias no se pueden negar, porque no conciben ningún concepto que se pueda comparar o referir. Ejemplo: "esta incoherencia (vacas no vacas, 2+2=4.893, omnisciencias ignorantes, omnipotencias impotentes) no es natural, por lo tanto (alto, espera), tampoco es ficticio o especulativo". Al no ser ni naturales, ni ficticias o ni especulativas, entonces la negación no tiene sentido porque no hay nada comparándose, ni refiriéndose, ni concibiéndose.
Negar una incoherencia, es como negar 'fjksafjskdfjdk'. ¿Qué leches se está negando, si no hay ni nada que negar?
El debate entonces racional es analizar si un relato (concepción, texto, argumento, teoría, escenario) es coherente, tal que dice algo, da igual si ficticio especulativo o natural; o si al analizarlo se comprueba que hay incoherencias tal que es un texto o construcción lingüística que no está diciendo ni nada.
Hay que señalar que hay un argumento que relata que el debate racional no tiene valor, y que sólo es válido el debate científico. Esto permite una fe que igualmente es irracional, no tiene sentido decir que la fe es racional porque se ha desvalorizado el debate racional y por lo tanto ya la fe es racional, esto no tiene sentido, es incoherente, es irracional. Y es fe porque se espera que la ciencia pudiera mañana encontrar soluciones que son a día de hoy incoherencias o inviabilidades racionales, que hace a esta fe irracional, y esperan que su fe se constate y supere esta irracionalidad.
- Este argumento igualmente es válido en el sentido de señalar que ni la ciencia, ni la racionalidad son omnisciencias, ni son absolutos, sino que son meramente operatividades o sistemas que tienen valor en su misma recursividad. La ciencia no dice que la naturaleza sea la Verdad, sino que se intente decir aquello que se adecue mejor a describir la naturaleza a través de un método comparativo compartido o en comprobación, tal que es verdad como recursividad, y lo mismo le pasa a la racionalidad, que no tiene porque ser la Verdad, sino que lo que se diga se adecue a un sistema u operatividad racional, tal que es verdad como recursividad.
El debate filosófico es un debate científico (literal), y un debate racional especulativo (literario), por lo tanto todo apunte que esté fuera de la ciencia, y de la racionalidad, es un apunte de fe que está fuera de la filosofía, del debate, de todo conocimiento humano. Que no quiere decir por ello que no sea bueno el debate, porque el debate siempre puede hacer progresar y hacer que mañana cambie o se abra a más concepciones la filosofía, pero hasta nueva orden, pues lo que hay es lo que hay dentro de la filosofía (el conocimiento humano, la ciencia, y la racionalidad especulativa).