Alexandre Xavier escribió:
Este único yo que, en el fondo, es la realidad, ¿de qué manera puede, razonablemente, obtener su propia felicidad?
Hola Alexandre...
Me imagino hablas del yo como estado lógico individual, porque el yo superior ha hecho de la felicidad una inmanencia.
Dónde radica la felicidad?, en el amor, en ese amor profundo inmanente del ser, aquel donde se sabe parte de lo demás, donde el espíritu hace de lo que le rodea, uno consigo mismo,
evoca aquella verdad de unicidad que subyace mas allá del estado lógico que está experimentando,
porque, qué es el amor?,,, EL AMOR ES UN SENTIMIENTO DIVINO DE PERTENENCIA,
esta pertenencia debe entenderse no como que las cosas me pertenecen, sino como que soy parte de aquello por lo que siento amor (una misma cosa), por ello el amor verdadero es incondicional
es así que al ver un paisaje, observar juguetear un perro, el bullicio los niños, el ocaso y la brisa del atardecer, el ambiente de Navidad, el aroma del café de la abuela, el trinar de las aves, incluso respirar, son cosas que evocan en el espíritu aquella felicidad que ya posee.
Qué se necesita para sentir esta felicidad?,,, TRANQUILIDAD,
pero esta tranquilidad vendría a ser mas bien del alma y no tanto del cuerpo,
recuerdo que estando enfermo cuando niño, el solo ver llegar a mis primos me traía gran felicidad,
los niños gozan de una tranquilidad natural, por ello son naturalmente felices hasta que no se los acosa con el estres propio de la sociedad:
Tienes que hacer esto,
tienes que ser esto,
tienes que tener esto...
Estos acosos eventualmente hacen que aquella tranquilidad natural se pierda, y con ello se opaque la felicidad, lo que aunado a otras circunstancias negativas de la vida, causa lo que en algunos se vuelve una barrera infranqueable el volver a la tranquilidad de su ser.
Si quieres ser feliz busca la tranquilidad de tu ser