Aun en el supuesto caso de estar en posesión de la razón, para hacerle ver a alguien que está equivocado .........sería más positivo emplear la violencia verbal que los argumentos y el respeto?………...Pues según lo veo yo, con la violencia verbal lo único que se puede conseguir es más violencia verbal, pero nunca convencer a nuestro interlocutor de su supuesto error, cosa que quizás con argumentos y respeto es posible que consigamosKaarkolanderta escribió: ↑20 Oct 2021, 11:26En aquellos casos en los que es necesaria una reaccion inmediata de una persona que tiene metida la cabeza en el culo y necesita que la espabilentoni escribió: ↑18 Oct 2021, 19:32¿En qué casos consideras que puede ser positivo utilizar la violencia verval? Pues a mi no me se ocurrenKaarkolanderta escribió: ↑04 Oct 2021, 00:51
Considero que no tiene sentido decir que la violencia(verbal o en cualquiera de sus expresiones) sea o "positiva" o "algo negativo que hay que evitar" como un absoluto, habrá que estudiar en cada caso si procede emplearla o no.
¿Donde termina el respeto y empieza el insulto?
Re: ¿Donde termina el respeto y empieza el insulto?
Re: ¿Donde termina el respeto y empieza el insulto?
Está claro, por lo que he visto en este foro por parte de algunos usuarios el respeto termina y empieza el insulto cuando faltan argumentos racionales que puedan rebatir los argumentos del oponente.
Entonces como no les queda otra, es cuando recurren al insulto. Es el modus operandi de ciertas personas de este foro, y si les quitamos eso ¿ Que van a decir? Si no son capaces de hilar un argumento racional sólo tienen el recurso de las falacias ad hominen o el insulto.
Y ni siquiera se dan cuenta de que contra más lo emplean, más se muestran como son, o sea carentes de raciocinio y de inteligencia.
Entonces como no les queda otra, es cuando recurren al insulto. Es el modus operandi de ciertas personas de este foro, y si les quitamos eso ¿ Que van a decir? Si no son capaces de hilar un argumento racional sólo tienen el recurso de las falacias ad hominen o el insulto.
Y ni siquiera se dan cuenta de que contra más lo emplean, más se muestran como son, o sea carentes de raciocinio y de inteligencia.