Disonancia Cognitiva

Felix
Mensajes: 31
Registrado: 27 Nov 2014, 03:34

Disonancia Cognitiva

Mensaje por Felix »

“Hay gente que a veces sostiene una creencia fundamental muy fuerte.

Cuando se les presentan pruebas que van en contra de esa creencia, la nueva evidencia no puede ser aceptada.
Se crea una sensación extremadamente incomoda, llamada disonancia cognitiva.

Y debido a que es tan importante proteger esa creencia fundamental, se racionalizara, se ignorara e incluso se negara todo aquello que no encaje con la creencia fundamental.”

En el mundo de hoy en día la evolución ha alcanzado un punto en que el ser humano se ha vuelto pensante aunque sea solo en función y proporción de sus propios intereses, aun en contra de la globalización de la tecnología, que se vuelve un arma de doble filo al distraer y concentrar al individuo en la expresión social tecnológica e incluso múltiples dimensiones de la expresión humana, en donde desembocan no solo trivialidades que son una representación de la psicología del colectivo, sino que también pensamientos de aspecto existencial en los que incluimos desde las facetas emocionales, sentimentales, pensamentales y mentales del humano que terminan tanto como comienzan una nueva existencia ajena a quien lo expresa, en un plano dimensional de tipo informático en donde argumentos y expresiones tan simples como complejas llegan a ser semilla de nacimiento libre para quien este propenso a captarlas como identificación de su propio pensamiento, dispuesto o simplemente inclinado en circunstancias por su mente a percibir la documentación e imágenes de la realidad de seres humanos que están fuera de su horizonte de sucesos más próximo, ante el cual la reacción genuina del ser humano es de naturaleza relativa por mucho que el mundo condicione las circunstancias de toda persona, colocando como aspecto común que para leer los pensamientos ajenos hay que estar de una u otra forma frente a las páginas de un libro o al monitor de una computadora, o dispositivo en donde tendrán en común una cantidad mínima de factores implícitos en las circunstancias que se imponen ante el medio de percepción y expresión que pueden ser los dos elementos antes mencionados.

Si hoy yo expresara una hipótesis que pueda o no tener pensamientos que lo precedan como decir "la realidad es tan difusa como confusa en la relatividad del tema para una mente no organizada", esto puede generar una gamma de reacciones que vayan desde ignorarlo por no parecerle relevante al público y en efecto por no serlo hasta el punto de la asociación de ideas del lector, que tenga ya en su psique información documentada que hasta entonces solo crea que está en relación del tema o que en efecto sean inspiración de la misma naturaleza de su idea de origen, aunque por otra parte también existe la absoluta seguridad de lo que se entiende, cuando la idea o más bien esencia de lo que se lee es comprendida, quizá no solo en su intensión sino en su aplicación básica en la realidad, en la que se conjuga toda lógica como correcta o incorrecta en base a su funcionamiento fluido, el cual se dinamiza como el agua que corre en dirección de la gravedad, a través de un laberinto de abstracciones en cuanto a mayor cercanía al fondo, mayor realidad se le adjunta a cualquier tipo de información que se capte en base a la percepción lógica que termina siendo de naturaleza totalmente personal, por cuenta de las circunstancias del correr de la vida propia frente a la realidad, en donde terminamos "siendo lo que hacemos de nosotros mismos con lo que hicieron de nosotros" palabras que han trascendido la vida de su propio autor, a través de las mentes de diferentes pensadores que respetaron la interpretación precisa de las letras de Sartre en esa frase que es, en su función de ser y estar cierta hasta el punto en que el pensamiento y la voluntad se conjugan para distorsionar el laberinto de lo establecido y encontrar en si como respuesta, que el agua que va fluyendo hacia abajo, llego profundo aunque no al fondo, siempre y cuando su fondo no sea otro que la profundidad precisa de la premisa especifica que denuncia la realidad perceptible en una generalidad especifica extraña en su propia naturaleza, dentro de lo que como realidad limitada definimos “que es correcto y cierto, sabiendo o no que lo correcto y lo cierto son conceptos vagos que se sustenta en la conciencia y el conocimiento, que nunca han dejado de ser conceptos abstractos en todo plano visual de su extensión,” por lo que aquello que consideramos cierto o correcto es así solo en función de la lógica que hasta el presente en que por necedad o necesidad, no nos cuestionamos, cuando este confronta nuestras propias bases que de una u otra forma son esenciales para el órgano de la mente voluntaria cuya lógica se ve sustentada en un sin número de casos en conceptos cerrados de ideas básicas, como la vida, la existencia, el porqué, el donde, el para donde, el hacia donde, el para qué y tantas preguntas que dan por sentada su respuesta solo dentro del contexto de su propio horizonte de sucesos, que es la cueva en donde las sombras se proyectan para callar, hasta que nos atrevemos a entender a profundidad aquello que conceptualizamos como malo o incierto y a cuestionar las bases de lo que conocemos como bueno o correcto en donde cualquier mente anclada a la seguridad personal y material halara las manos del aventurero en contra del descubrimiento de nuevas realidades o en otras circunstancias invitara al lector a reconsiderar los conceptos que tiene tan seguros en su propia mente y que han llegado a convertirse en la convicción cuya realidad lo rodea a la hora de pensar en algo que este más allá de su propio entendimiento, envolviéndolo en una seguridad que nos dicta por instintos mentales que lo que nosotros conocemos, tal y como lo conocemos es correcto, en donde el sentido común ha determinar la actitud correcta frente a aquello en lo que evidentemente las cosas que sabemos o creemos saber son diferentes frente a este juicio, a no ser que en cuyo caso hemos captado o generado con sinceridad presente nuestros pensamientos, no estaríamos muy lejos de la realidad siempre y cuando el individuo no cierre su mente a creer que esta es el presente más cierto de la realidad que percibe...

Como individuos parte de una sociedad sustentada en parte en un concepto de conciencia colectiva que solo funciona en las proporciones de un grupo establecido por los años como un país, un municipio, una familia; en función de esto poseemos la propiedad de encontrar conocimientos dentro y fuera de nuestra mente, aunque esta sea parte de la conciencia familiar, en la que muchos hemos crecido, aunque existen diferentes clases de excepciones que inclinan al ser humano a llegar a ser en una forma más individual incluso perteneciendo a un grupo como tal, aunque por lo pronto no podemos liberarnos de pertenecer por lo menos a la conciencia de nuestra propia urbanidad, igualmente poseemos la libertad de pensar como individuos que basados en su propio sistema de valoraciones personales, inclinadas por las circunstancias de lo voluntario y lo involuntario, alcanzamos a captar ideas, pensamientos, o conocimientos que no necesariamente fueron descubiertos por nosotros mismos, desde el punto en que leemos un libro y aceptamos su argumento como lógico, convirtiéndolo en una extensión de la expresión de nuestra propia mente, hasta el punto en que captamos una idea como nacida de ninguna parte, en donde solo se demuestra así misma la faceta ideal de los pensamientos como constructos de la participación de una idea que la atmosfera como conciencia o inconciencia de un colectivo por grande o pequeño que este sea, nos condiciona a pensarla dentro de nuestra propia libertad, entendiendo que toda extensión de nosotros mismos que voluntaria e involuntariamente adoptamos, juega un papel en nuestra mente, ya sea como conocimiento fundamental de la lógica que hasta el día de hoy hemos labrado y que sin duda nos habrá sido muy efectiva si hemos sido astutos para aplicarla o bien como un constructo mental parte o no de los mecanismos lógicos que ayudan a concluir la realidad, igualmente no es la única perspectiva valida de nuestro propio conocimiento pues como seres psicológicos podemos proponernos a nosotros mismos como un caso único de especificaciones singulares e irrepetibles, en su forma más esencial que como tal poseen la propiedad de vislumbrar a través de su conciencia, la perspectiva ajena como ajena, cuando se aleja la apariencia de su propia forma, de la de los pensamientos que nos preceden en función de nuestra mente, sin embargo cuando existe un reconocimiento de aquello que aunque no lo hayamos pensado por nosotros mismos, es información que expresa nuestra interpretación personal de la realidad que percibimos, entonces sí, la mente se muestra más dispuesta a pensar ya sea por divagación o por un interés preciso, en el pensamiento ajeno, que entonces ya no es tan ajeno porque ha identificado sin buscarlo parte de la realidad que hemos aceptado como lógica hasta ese instante.

Conociendo los múltiples significados que diferentes perspectivas pueden dar a un objeto de pensamiento, la mente suele cerrarse si no existe un reconocimiento que identifique ya sea los fundamentos o una parte de nuestra propia lógica personal, que como sabemos ha sido labrado por las experiencias personales como ciencia mas creíble, entendiendo experiencia como un fenómeno tanto físico como mental, en el cual solemos ser jueces de la información que esta nos proponga, aunque la mente acepte sin chistar la lógica que ha sido no solo mostrada, sino demostrada a través de una vivencia personal. Y hasta aquí podemos o no aceptar muchos de los conceptos que propongo no solo como teorías, sino también como conocimientos esta lógica como experiencia personal que es tan subjetiva como cualquier otra en toda la extensión de sus especificaciones que llegan a significar a un objeto de pensamiento especifico o general, pero que sin embargo me ubica en función de mi sinceridad hacia la realidad como una célula más sobre la superficie de una esfera, en cuanto la esfera somos todos y el centro de esta es la realidad que nos dota de una combinación de coordenadas específicas y únicas desde donde contemplarla, por lo que la visión que se posea de cualquier fenómeno lógico adherido a la sinceridad me proporciona no solo a mi sino a todo aquel que este en la superficie de la esfera e incluso a una mayor profundidad de ella, de una visión de la realidad aceptable bajo cualquier lógica incluso siendo subjetiva y única, por lo que entenderemos por simple deducción que todas las perspectivas que conforman esta esfera son realidades consolidadas en sí mismas como potenciales o como realmente activas, cuando desde sus coordenadas han alcanzado a ver el centro de la esfera, que puede ser cualquier situación que exprese la realidad de un objeto de pensamiento o un fenómeno social en el cual podamos dilucidar las verdaderas circunstancias de su llegar a ser dentro del mundo como realidad subjetiva, hasta el punto de nuestro entendimiento personal. He ahí una faceta más de la realidad que como seres sociales podemos compartir diversas realidades con otros individuos, que no por ser individuos posean una perspectiva de la realidad que no se parezca o se identifique en su expresión con la nuestra, por lo que mantener una mente abierta al cambio siempre y cuando esté sujeta a una convicción, que para su funcionamiento más ideal tendría que ser la dilucidación sincera del centro de la esfera desde nuestras propias coordenadas en ella, se abre a la captación de nuevas ideas cuando se acepta como cierta la existencia de realidades alternas a la nuestra, que igualmente no son absolutas en toda su extensión aun siendo ciertas dentro de su propio horizonte de sucesos, ante lo cual se nos facilita entender la realidad ajena incluso en convicción de nuestra propia conciencia de la realidad que para el individuo puede ser subjetiva u objetiva dependiendo de la formación y funcionamiento de su propia mente, que como seres que devienen como individuos en sociedad, ha sido labrada por pensamientos ajenos a nivel académico y por pensamientos individuales a nivel personal, en el momento que comenzamos a captar nuestro propio sistema de valoraciones conforme a la experiencia personal.

La importancia de conocer que la realidad puede ser tan confusa desde que comenzamos a dilucidar la situación implícita en otras perspectivas, que vuelve a nuestra propia concepción de la realidad algo más difuso, en el sentido de su amplitud de conciencia y por consecuencia corremos el riesgo anhelado por muchos seres consientes, de dejar de ser los protagonistas de nuestra propia vida, aunque existen casos más generales en que esto sucede cuando una extensión de nosotros cobra vida como existencia individual, como es el caso de los padres con los hijos, aunque no me malentiendan, ser el protagonista de la existencia propia no es algo malo, pues la vida no es un largo metraje, aunque a veces así lo parezca, sin embargo lo que quiero dar a entender es que el egocentrismo cesa frente a la conciencia de la realidad concisa de otras perspectivas humanas.
Responder